Una cadena de suministro sólida y bien administrada puede ser la clave de la mejora de rendimiento de una empresa. Implementar una cadena de suministro integrada es el camino y modo más óptimo de establecer una mecánica de trabajo que refuerce los procesos de compras.
A medida que ha aumentado la importancia de cuidar y reforzar la cadena de suministro, las empresas han comenzado a aplicar tareas con el fin de crear una cadena de suministro integrada.
Pero ¿Qué es realmente una cadena de suministro integrada?
La integración de la cadena de suministro es una estrecha alineación y coordinación dentro de una cadena de suministro, donde la tecnología cumple un papel esencial centralizando la gestión de los sistemas de información.
Esto quiere decir que se elimina la idea de administrar cada parte de la cadena de suministro como una función independiente, centrándose en la comprensión y administración de las conexiones y las interdependencias que están sujetas a la cadena de suministro.
Una cadena de suministro no integrada es aquella en la que ninguna de las piezas de la cadena de suministro se comunica a la perfección entre sí.
Por lo tanto, se establece un trabajo conjunto de las funciones, por ejemplo, de abastecimiento, planificación de la demanda, inventario, almacenamiento, logística…
Los portales de compras son el foco integrador de esta estrategia en la cadena de suministro, reuniendo los datos e información relativos al proceso de compras a lo largo de sus diferentes etapas.
Ventajas de una cadena de suministro integrada
Por lo general, en respuesta a las dificultades de administrar un sistema no integrado, muchas empresas convierten sus operaciones en cadenas de suministro integradas.
Las ventajas que vienen con una cadena de suministro integrada hacen que sea mucho más fácil optimizar el rendimiento general.
Veamos algunas de estas ventajas que subrayan la importancia de tener en cuenta la aplicación de este modelo de gestión de la cadena de suministro:
Flexibilidad
La capacidad de ser flexible y adaptarse a diferentes situaciones es importante en cualquier industria competitiva.
Tener una cadena de suministro integrada permite a las empresas hacer esto de manera mucho más rápida y fluida de lo que sería posible con un modelo logístico tradicional; por ejemplo, operar una cadena de suministro no integrada hace que sea casi imposible tomar decisiones sobre la marcha sin causar interrupciones menores.
Eliminación de Residuos
La reducción de residuos es un reto prioritario para las empresas, pues implica ahorro de costes a largo plazo.
La gestión centralizada e integrada de la cadena de suministro, favorece una reducción de residuos planificada y guiada, optimizando el proceso de reducción de residuos en base a una estrategia eficiente y conjunta.
Aumento de la colaboración y visibilidad
Es importante vincular tantas áreas como sea posible para permitir una fuerte colaboración, con el objetivo de ser lo más eficiente posible.
La centralización que define la integración de la cadena de suministro, garantiza la visibilidad en toda la empresa, facilitando la colaboración en equipo y manteniendo a todas las partes interesadas alineadas en todo el proceso de la cadena de suministro.
Una vez más la tecnología es la solución ideal para poder fortalecer los procesos de negocio de las empresas actuales, mejorando tanto a nivel funcional como organizativo.
¿Compartes las ventajas comentadas? Queremos saber tu opinión. Visita nuestra página de LinkedIn ¡Te esperamos!