La gestión de las relaciones con los proveedores (SRM) es una estrategia básica para el mejor desempeño de los proveedores. La gestión SRM del proveedor requiere de analizar tres fases bien diferenciadas por las que pasa este importante aliado.
La colaboración con un proveedor suele pasar por una serie de etapas muy diferentes en el que la empresa compradora debe de saber gestionar y procesar del modo más correcto.
A continuación, mostramos cuales son estas fase claves de la gestión SRM del proveedor donde hay que incidir y trabajar para lograr el mayor rendimiento posible.
Gestión SRM del proveedor – Fases del proveedor
Cuando se establece una definición más profunda de la gestión de las relaciones con los proveedores (SRM) es posible destacar tres fases principales del ciclo de vida del proveedor.
Estas fases muestran una serie de cualidades y entornos de trabajo en los que la empresa debe trabajar mediante una buena estrategia SRM.
Así pues una buena estrategia SRM puede subdividirse en las tres fases principales muy relacionadas entre sí:
- Gestión de proveedores externos.
- Gestión interna del proveedor.
- Gestión de la disolución del proveedor.
Gestión de proveedores externos
La base principal de la gestión de proveedores externos es la observación de aquellos proveedores que aún no tienen relación con la empresa compradora, estos son llamados proveedores externos.
De este modo, uno de los grandes objetivos de esta fase es mantener relaciones con los mejores proveedores disponibles en el mercado. De este modo es posible hacer un seguimiento y monitorización de aquellos proveedores que cumplan con las necesidades de la empresa.
En el momento que un proveedor es apto para una estrategia de compras, se establecerá el contacto pertinente para comenzar relaciones con el fin de llegar a un acuerdo de colaboración.
No hay duda que existe una amplia oferta de proveedores externos por ello la importancia de realizar este estudio para facilitar la identificación final del más adecuado en cada caso.
Gestión interna del proveedor
Una vez pasada esta primera fase de gestión SRM del proveedor, el llamado proveedor externo pasa ser proveedor interno.
El objetivo de la gestión de proveedores internos es establecer y mantener relaciones con estos para mejorar la creación de valor.
Sin embargo, los proveedores tienen un potencial diferente para aumentar el valor y, por tanto, deben ser tratados de forma desigual.
Por ello cada proveedor debe ser analizado de forma individual para poder conocer sus virtudes y defectos y trabajar para poder obtener el máximo rendimiento para las partes interesadas.
Los proveedores deben de cumplir ciertos requisitos como pueden ser como la puntualidad, el precio y la calidad del producto/servicio. Las empresas compradoras pueden actuar de forma diferente, en función de la importancia estratégica del proveedor y del valor potencial futuro del proveedor.
Gestión de la disolución del proveedor
Esta es la última fase, la gestión de la desvinculación con el proveedor se refiere a la evidencia de que una relación no deseada, por el motivo que sea, debe llegar a su fin.
Aunque la disolución es una tarea común, la importancia de la gestión de la disolución suele subestimarse en la investigación y en la práctica de la gestión.
Se debe relacionar los costes de la disolución con el proveedor que sale y el coste de la adquisición del nuevo proveedor además de las cualidades, pros y contras para conseguir una gestión de la disolución del proveedor óptima.
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