La subasta inversa es una de las herramientas de negociación más poderosas que puede tener un departamento de compras. En una época en el que las condiciones económicas del mercado cada vez con más difíciles, toca negociar al límite gracias a las subastas inversas.
A través de una plataforma de compras es muy sencillo crear y hacer un seguimiento real de una subasta inversa, lo que ha hecho que las subastas inversas se hayan situado en un lugar privilegiado en las estrategias de compras de las empresas.
Veamos como una subasta inversa nos puede hacer negociar al límite y obtener los mejores productos al mejor precio posible.
Subasta inversa, negociación eficaz
Una subasta inversa no se comporta como una subasta normal. En este caso, los participantes compiten por obtener el servicio o producto deseado por la empresa.
Esto hace que los precios ofrecidos por los proveedores vayan disminuyendo durante el periodo de la subasta.
De este modo se crea un escenario donde diversos proveedores compiten entre sí donde la empresa compradora obtendrá la mejor opción calidad/precio.
Pero además, una subasta inversa es un proceso controlado en el cual se determinan los mejores perfiles de proveedores para participar en ella.
Durante el proceso de creación de las subastas inversas se suele requerir una calificación previa de los proveedores, antes de poder participar en la subasta.
Esta calificación previa a la inclusión en una subasta inversa suele incluir el cumplimiento de:
- Los criterios de suministro obligatorios.
- Aceptar los términos y condiciones de la subasta, así como las especificaciones del contrato.
En el transcurso de la subasta inversa los proveedores establecerán su mejor oferta y competirán por el precio ofertado.
Pero ¿Cuándo se debe utilizar una subasta inversa?
Realmente no existen unas normas para el uso de las subastas inversas. Sin duda alguna el mejor contexto para lograr el éxito es dentro de un mercado competitivo donde los proveedores “luchen” entre sí por lograr los contratos.
El uso de una subasta inversa implica el hecho de tomar la decisión sustentada en un análisis previo del mercado basado en:
- Por un lado en la necesidad del bien o servicio.
- Los riesgos y complejidad de obtenerlo mediante otro tipo de contratación.
- Estudio del mercado para evaluar la idoneidad de la utilización de este recurso.
Aprobada la decisión del uso de estas subastas inversas queda identificar si el producto es el más adecuado para este tipo de recursos:
- La posibilidad de especificar claramente los requisitos del producto o servicio.
- El precio es el factor fundamental que marca la competencia.
- Existencia o no de un mercado competitivo con los suficientes proveedores para ese producto servicio.
Beneficios de las subastas inversas
A día de hoy, no hay ninguna duda que las subastas inversas ofrecen interesantes beneficios para las empresas.
Disfrutar de estos beneficios dependerá del buen uso y la idoneidad de las subastas inversas. Entre otros interesantes beneficios, podemos destacar los siguientes:
- Ahorro de costes gracias a los bajos precios.
- Proceso que ofrece transparencia, credibilidad y equidad.
- Aumento de la oferta por fuerte competencia.
- Importante ahorro de tiempo.
El uso de las subasta inversas te ayuda a negociar hasta el límite ¿Por qué no lo intentas?
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